Y sí. Sí es lo que parece. Hablamos de una de las esculturas más conocidas de la Historia del Arte. La Galleria dell’Accademia de Florencia alberga la obra más afamada del artista renacentista Miguel Ángel Buonarroti. Una colosal estatua que sobrepasa los cinco metros de altura que se diseñó para adornar la Piazza de la Signoria de esta maravillosa ciudad italiana: el célebre David.

Cuando Miguel Ángel la esculpió sobre mármol, adaptó en ella el canon de proporciones imperante durante el siglo XVI. Y ese canon determinaba que los genitales masculinos debían ser pequeños para poder ser bellos. Nada de genitales desorbitados a lo Nacho Vidal. Por ello, siguiendo la tendencia del momento, el italiano realizó una de las obras de arte más clásica y discutida que resulta ser una de las más visitadas por los turistas.

Pero, ¿y si el propio David albergara vida? O peor aún, ¿y si fuera consciente del tamaño de sus genitales? El vídeo de Michelle Yi y Yaron Farkash resulta ser una divertida parodia sobre la importancia del miembro masculino llevada a la historia del arte.