Encontrar ese lugar ideal donde poder construir tu hogar y desarrollar tu vida no tiene precio. Si además se ubica en la isla de Madeira, uno de los lugares más remotos que forma parte de nuestro continente, donde hay uno de los bosques de laurel mejor conservado del mundo y cuyo suelo es fértil para dar frutos como maracuyá, guayabas o mango, no hay que dejarlo pasar. Algo así debieron de pensar los habitantes de dos casas situadas en Arco da Calheta cuando encontraron las soluciones constructivas de Tabaibo Atelier.

Cuando el terreno no te lo pone fácil hay que buscar la manera más adecuada de adaptar los requisitos constructivos del cliente. Para poder dar una solución práctica, Tabaibo Atelier emplea un sistema de construcción en terrazas hacia el Atlántico. De esa manera, el terreno queda dividido según la orografía del terreno. En principio, hay dos terrazas diferenciadas. La primera alberga la parte superior de la vivienda, donde se sitúan los espacios comunes, como la cocina, el salón, el baño y el acceso a la misma. La segunda, acoge los dormitorios y el patio con piscina. De esta forma, la entrada a la casa se hace desde un estrato superior que permite una mejor comunicación con las vías de circulación colindantes.

Hay que tener en cuenta que, el terreno sobre la que se construyen estas viviendas, es tierra de cultivo. En ella abundan las plataneras. La mayor parte de la isla está delimitada en acantilados con vistas al Atlántico. De esta forma, situando los espacios de manera inversa se consigue una optimización tanto de las vistas al mar como de la comunicación con el exterior.

Tabaibo Atelier ha tenido en cuenta la sencillez del paisaje isleño a la hora de decorar el interior y el exterior. Las fachadas de la vivienda adquieren un tono coral que contrasta fuertemente con la tonalidad de verde que adquiere el paisaje agrícola. Los muros de mampostería son los que marcan la transición entre vivienda y mundo exterior. Al interior, el blanco es el color que inunda todo, buscando la luminosidad en todo momento. El mobiliario sencillo y mediterráneo le da ese toque natural, cómodo y sosegado ideal para la vida en estas latitudes del Atlántico.

Tabaibo Atelier consigue así un diseño práctico, adaptable, apacible y novedoso, donde tiene cabida la naturaleza plena adaptándola a las necesidades de sus habitantes. Las dos soluciones constructivas resultan muy acertadas para aprovechar al máximo el terreno y sus accidentes.

Fotografía Woodland Studio.