Rubia oxigenada, facciones delicadas, delgadez asegurada, víctima de la moda y con moral fácil de doblegar. Estos atributos bien podrían ser los de la muñeca más popular de Mattel, Barbie, pero en este caso tratábamos de describir a Paris Hilton sin entrar demasiado a valorar su tórrido pasado y su gusto por grabar sus peripecias sexuales para luego hacerse la sorprendida cuando es lo más visto en internet.