Una de las constantes de la arquitectura es la recuperación y remodelación de espacios y construcciones pasadas que necesitan un lavado de cara para destinarlas a un nuevo uso. Las casas de típicas de campo, para pasar el fin de semana, son las más proclives a este tipo de intervenciones y las adaptaciones más frecuentes están destinadas a un mejor aprovechamiento de los espacios y una amplia cobertura de tecnología destinada a cubrir las exigencias climáticas internas.