Es curioso, pero las personas podemos llegar a evitar y temer aquello que más ansiamos o deseamos. ¿Contradictorio?
Puede resultar paradójico cómo, sin querer o de forma inconsciente, boicoteamos algunas situaciones; evitamos, por ejemplo, algo que nos apetece por si acaso sale mal: una relación sentimental, aplicar para un puesto de trabajo que nos interesa, tratar de cumplir un sueño… Somos capaces de mentirnos a nosotros mismos y contarnos incluso que queremos algo completamente diferente, o ponernos millones de excusas que, en el fondo, bien sabemos que esconden una realidad distinta.