Hasta el próximo 4 de marzo, la galería Juana de Aizpuru expondrá en sus salas la obra del portugués Pedro Cabrita Reis, uno de los artistas con mayor proyección internacional del país luso. A este “recolector”, como a él le gusta definirse, siente curiosidad por todo y es capaz de  sorprender al espectador con una obra fruto de su pasión por el dibujo, resultado de una práctica constante y del pensamiento y la inteligencia que deriva del mismo proceso creativo.

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La disciplina mental es la base de toda obra para el artista luso. El dibujo no necesita de una acción preparatoria previa porque es el resultado directo de la idea primigenia del artista. En esta exposición, titulada “Herbarium”, las obras que se exhiben son dibujos realizados en sus talleres de Lisboa, de la sierra de Tavira y el sur de Portugal y en ella incorpora elementos autobiógraficos para reconocer sus raíces y su procedencia.

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Aquí ha dejado a un lado el uso de materiales industriales para introducir elementos naturales, como raíces de algarrobo y otras plantas de la serranía lusa, mezcladas con grafito, óleo, barnices, collage, bolígrafo, esmaltes, acrílico o lápiz de cera. Consigue así una obra donde mezcla el dibujo con la escultura, obteniendo como resultado una reflexión atropológica a través del concepto del espacio y la memoria.