Si diseño es lo que queréis no tenéis más que ver esta casa-cubo en Hungría. Se trata de una casa donde las lineas puras, perspectivas y puntos de fuga armonizan como si de una sinfonía de Bach se tratara. Esta cabaña rectilínea está diseñada por el joven estudio de arquitectos Béres y construida como casa de vacaciones en la falda de una histórica ciudad húngara, Koszeg. Attila Béres y Jusztina Balázs son los jóvenes arquitectos encargados del diseño y construcción de esta vivienda, que empezó el verano de 2009 y finalizó justo antes que acabara 2013 y que ahora en 2014 se da conocer al resto del mundo.

La casa está localizada en un país donde el clima es muy extremo y diverso. Veranos calurosos e inviernos fríos han hecho que las decisiones que el equipo de arquitectos estuvieran enfocadas en hacer de la casa una vivienda confortable y fácil de vivir durante las cuatro estaciones. Los clientes ademas tenían una idea muy clara de lo que querían conseguir en términos de confort: una combinación de alta tecnología y soluciones ecológicas que permitieran un ahorro en las facturas.

Un marco negro geométrico encaja las dos partes en las que se divide la casa, mientras que la terraza que comunica estas dos secciones ofrecen una vista doble: el magnifico paisaje y la roca que recubre la parte posterior de la casa.

«La luz natural y las vistas fueron dos de los factores que impulsaron en primer lugar este proyecto. Así que todo tenia que girar entorno a estos dos», han dicho los arquitectos.

La pareja propietario se pasaron tres años construyendo esta casa ellos mismos.

La casa esta construida a partir de la madera de Alerce (árbol majestuoso de hoja caduca que se encuentra mayoritariamente en Canadá y Rusia). Este material ha sido la materia prima para diseñar tanto el exterior como el interior de esta estructura. La diferencia han sido los acabados. Según hemos podido saber de fuentes del estudio, para el exterior se ha usado está madera sin pulir pintada de negro y para el interior se ha tratado la madera para dar un aspecto más suave y menos angosto. «Es una manera de conectar el exterior con el interior de la vivienda», afirman.

La parte más grande de la casa contiene los principales espacios para la vivienda incluyendo una combinación de sala de estar, comedor y cocina y la habitación principal con baño y sauna adjunta.La parte oeste de la casa és la más pequeña y acoge la habitación de invitados. Como el resto de los interiores, se caracteriza por una sobriedad en el diseño con paredes blancas, muebles rectos y suelos panelados.

En cualquier caso, esta joya del diseño y retiro para dos afortunados es mejor verla que hablar sobre ella. E aquí estas fotos hechas por Tamás Bujnovszky.

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