No llevamos ni una semana de primavera, pero parece que algo ha cambiado en el aire. Y cuando hablamos de primavera es inevitable pensar en flores finalmente llevando los parques. Precisamente en el Museo Nacional Miraikan de Ciencias Emergentes e Innovación existe una instalación compuesta por 2.300 flores suspendidas en el aire. Fueron el grupo japonés TeamLab, los encargados de diseñar esta deslumbrante experiencia interactiva. ¿ Recordáis la instalación de arte «Rain Room» en la cual se andaba bajo la lluvia sin mojarse? Esto es algo parecido, pero con flores que parecen levitar a tu alrededor.
Este grupo de ultra-tecnólogos con sede en Tokio, Japón, ha sabido crear un espacio donde el espectador se siente el protagonista mientras camina por un campo de flores flotante. Las 2300 plantas están suspendidas en una cúpula y responden ya desde el primer momento en que un visitante entra en la habitación. Interactúan e incluso parecen dan la bienvenida a la persona moviéndose hacia ellos, llegan a crear un espacio semiesférico en constante movimiento alrededor del espectador y que da la ilusión de que este está suspendido.
Esta experiencia interactiva, llamada «Floating Flower Garden», funciona con un sistema similar al de la exhibición del MOMA en 2013 «Rain Room». Ambos se sirven de sensores que detectan el movimiento y , en el caso de esta instalación, hacen que las flores se eleven. Un mar de vegetación que podría estar sacado de una película de Hayao Miyazaki.
La pieza fue inspirada por un koan Zen (una parábola) de Nanquan Puyuan, el fundador de un famoso monasterio. Según se cuenta, Nanquan pasó un total 30 años en un refugio en mitad de la montaña sin salir. A petición del gobernador, finalmente descendió y enseñó a los residentes distintas enseñanzas Zen, centrandóse en cómo los seres humanos y la naturaleza son uno, y deben fundirse en un tejido sin costuras.
En un primer momento la exposición esperaba cerrar sus puertas el 1 de Marzo, pero finalmente gracias a su popularidad, el plazo se ha extendido hasta 10 de mayo. Viendo este exquisito colorido no es difícil preguntarse por qué.
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