Si hay una película que ha conseguido explicar qué son las filias sexuales, ésa es ‘Kiki, el amor se hace‘. Una comedia llena de sexo y chascarrillos con el toque más particular de Paco León, en la que cinco historias de amor coinciden en un calenturiento verano madrileño. Ahora, para todos los que se encuentran en la capital madrileña sufriendo las altísimas temperaturas veraniegas Cibeles de Cine nos propone «refrescarnos» con Daikikis y talleres llenos de sexo y placer.

Una película presentada por el actor David Mora llenará el próximo jueves la Galería de Cristal de risas y erotismo. Junto al largometraje tendrá lugar una fiesta en la que la música, la diversión y el erotismo serán los ingredientes principales de este cóctel tropical perfecto para el verano. Desde las 20:00h y hasta las 22:00h (hora de la proyección), los asistentes de la película podrán divertirse en la ‘Fiesta del semáforo’. Al llegar a la taquilla, todo aquel que lo desee podrá ponerse una pegatina roja, naranja o verde, dependiendo de si ya tienen pareja, están abiertos al amor, o están buscando pareja activamente. Cibeles de Cine se convertirá así en el sitio perfecto para conocer gente nueva y compartir risas tanto antes como durante la proyección de ‘Kiki, el amor se hace’.

Kiki, el amor se hace

Además, en la zona de terraza y gastro de la Galería de Cristal se podrán degustar los originales cócteles ‘Daikikis’, ideados por Cibeles de Cine bajo el ingrediente estrella del cartel: la sandía. Para amenizar la fiesta, los asistentes podrán bailar sonidos tropicales y frescos de la mano del dj Lady Ego, habitual de la noche madrileña por sus sesiones en Que trabaje Rita.

Para los más atrevidos, la artista erótica y multidisciplinar Anahí Canela, conocida como EroticCanela, nos descubrirá en un taller-tuppersex el mundo de las filias y fetiches. También nos mostrará desde un punto de vista educativo y divertido las diferentes maneras de disfrutarlas.

Si no te quieres perder esta fiesta y estás deseando coger las entradas puedes entrar en su web, porque como ya decía el escritor francés Georges Bataille: «sin prohibiciones no hay erotismo»