OCULUS
Dos hermanos separados desde niños se reencuentran cuando el pequeño de los dos, sale de un centro psiquiátrico donde ha pasado su adolescencia tras haber disparado a su padre. Como ya hizo Coherence en su día, Oculus sorprende con un original planteamiento y descolocando al personal. De haber seguido otros derroteros, Oculus podría haber sido una de las películas más originales que hubieramos visto en el festival, pero desgraciadamente de espíritus que salen de espejos, está el cine de terror lleno. Y Sitges, más.
Estamos muy a favor de sus dos protagonistas, también de esos saltos temporales que consiguen crear una atmósfera tan personal. Incluso estamos a favor de algunas sus trampillas, pero … no hacía falta para nada, enseñar tanto al final. Subestimar al espectador es lo peor que le puede pasar a una película.
Nota: (5 estrellas)
Qué bien lo pasamos con El expediente Warren y qué tediosa llega a hacerse la película que lleva por título el nombre de la muñeca que coronaba la sala de los horrores en la primera cinta. Annabelle está plagada de escenas mil veces vistas, plagada de subidas del volumen de la música descaradamente, plagada de golpes en el techo, en el suelo, en las paredes… golpes que aburren y que están tan estratégicamente colocados que son totalmente previsibles. Annabelle tiene UNA secuencia buena, una secuencia en la que se pueda palpar la tensión. No sabemos si echaron el resto en la primera película o es que directamente la muñequita no daba para tanto.
Nota: (3 estrellas) y son muchas.
Cuando las cosas son evidentes, lo son. Y es evidente que Sitges quiere a David Cronenberg. No es su primera vez, ni será su última en el festival. Tras un primer pase algo accidentado, Maps to the stars arrancaba los aplausos del público a primera hora del día, para volver a hacerlo después, de nuevo durante la noche.
La nueva aventura Hollywoodiense del director (y esta sí que es Hollywoodiense de verdad…) relata de manera muy acida la historia de varios personajes, a cada cual más peculiar, en una búsqueda desesperada por formar parte del star system de la meca del cine. Muy destacable dentro de la cinta: la pelirroja del año, Julianne Moore, que además de proporcionarnos una interpretación merecedora del premio en Cannes, protagoniza una serie de escenas que quedarán grabadas en nuestra retina durante un tiempo.
No podemos decir que Maps to the stars sea la mejor película del festival, ni tampoco del director. Sin embargo, es admirable la capacidad que tiene Cronenberg de convertir a actores de cera (Robert Pattinson) en actores de verdad, o que al menos lo parezcan.
Meryl Streep, Oprah, Justin Bieber … cualquiera que esté un poco puesto en Hollywood disfrutará viendo desfilar a algunos de sus estandartes por la cinta de Cronenberg aunque no sean ellos quienes la protagonizan. Si no nos creen, vean Maps to the stars, igual les suena alguien…
Nota: (7 estrellas)
Maury y Bustillo nos presentan su nueva creación con el mismísimo Joe Dante (creador de Gremlins) en la sala. Emocionados e inquietos a la vez, deciden mencionarle para luego quedarse a ver la película de pie, a su lado, como el niño que permanece con la mirada fija en su padre, tras hacer algo, esperando su aprobación.
Los directores de Al interior vuelven a la gran pantalla con una cinta que tiene ciertas reminiscencias de Los Goonies o Cuenta conmigo pero, aquí, los tres amigos son perseguidos por un ser inhumano que solo busca hacer el mal. A pesar de la temática, y de la (mucha) sangre que baña la película, con Aux yeux des vivants queda demostrado que Alexander Bustillo y Julien Maury tienen su corazoncito; un poco gore, pero lo tienen. Y lo ponen de manifiesto en un escenario que no podría haber sido más adecuado: un estudio de cine abandonado.
Nota: (6 estrellas)
El aire a lo Submarine le precede. Richard Ayoade hace su segunda incursión en el mundo del cine adaptando la novela de Dostoievsky «El Doble». Excéntricamente situada en un escenario bastante distópico, visual y musicalmente potente, y con un Jesse Eisenberg en estado de gracia, The Double cuenta la historia de un empleado que ve cómo su vida es arrebatada por un hombre igual que él físicamente, pero totalmente distinto en el interior. Con ciertos golpes de efecto y referencias constantes al cine Hitchcockiano, puede ser de lo mejor que hemos visto estos días en Sitges. Quizás le falta algo de ritmo, pero este ejercicio algo experimental de Ayoade está más que bien.
Nota: (7 estrellas)
R100
Y llegamos a la cinta menos digerible del día. No sabemos si R100 es, efectivamente y como bien anuncia la propia película, una creación que solo entenderá la gente mayor de 100 años, osea, básicamente nadie. Hitoshi Matsumoto es consciente de su película y por ello entre secuencia y secuencia introduce ciertos mensajes que son balas directas al espectador.
R100, al final, no es más que una crítica a la sociedad de vida nipona. Una crítica que transforma los mensajes de dicha sociedad en sadomasoquismo desproporcionado y llevado a un terreno de lo absurdo que consigue desconectar cada una de las escenas de la película, haciendo que no entiendas demasiado. Tampoco hace falta entender mucho de la película, pues para eso está hecha así y el director ya se encarga de decírnoslo varias veces durante la hora y cuarenta minutos que dura la broma.
Lo que está claro es que R100 está realizada para un tipo de público concreto, no sabemos si mayor de 100 años, pero puede que sí…
Nota: (PUFFF…)
Seguiremos informando… Solo quedan 3 días: ¡NO HAY DOLOR!
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