Nos trasladamos a Suiza, para ser exactos al estudio de diseño y arquitectura  Spillmann Echsle Architekten, dirigido por Annette Spillmann y Harald Echsle. Esta pareja opera en un territorio que entrelaza la arquitectura, el arte y el diseño industrial, aunque su trabajo se centra en este último y la exploración de la nave. Pero lo esencial para cada uno de sus proyectos es el «diseño» en el proceso de producción en sí mismo, con el objetivo de crear entornos que potencian las sensaciones, generan espectáculo e invitan.

En 2006 comenzaron a acaparar atención con un proyecto arquitectónico para la tienda FREITAG, un rascacielos construido a base de contenedores reciclados. Un enfoque alternativo para la construcción prefabricada, rápido de instalar, de bajo costo, y ofrece en su medida, soluciones ecológicas.

Diecisiete contenedores de transporte marítimo fueron seleccionados especialmente en Hamburgo y se transportan a Zurich por ferrocarril  para luego ser apilados y montados en la creación de este insólito rascacielos. En la planta baja se encuentra un almacén de venta al por menor, la torre actúa como un punto de referencia en medio del eje ferroviario y la carretera. Las grandes ventanas ofrecen exposición con luz natural en las salas, que permiten vistas en ambas direcciones: de adentro hacia afuera y viceversa. Los clientes son transportados más allá de la gama de productos (más de 1.500 mochilas) a una plataforma de observación a unos 25 metros sobre el suelo, que ofrece extraordinarias vistas sobre la ciudad de Zurich, el tráfico, el lago y las montañas.

Desde entonces, este equipo ha creado proyectos tanto para tiendas como particulares, incluso desarrollaron una instalación para una escuela de música. Pero en todos ellos mantienen una linea común con su estilo nórdico característico.  Se sirven de un sistema que combina las divisiones en el espacio, usando la luz natural dentro de los edificios para crear espacios más grandes. Otra de las razones que resaltan estas lineas minimalistas y modernas son los materiales que usan: hormigón, vidrio y elementos cromados.

El pasado año decidieron salir de su zona de confort y construyeron la House of Switzeland, un pabellón móvil que representó a Suiza en el extranjero. El edificio fue construido para los Juegos Olímpicos de Invierno de 2014 en Rusia. La casa está construida íntegramente a partir de elementos prefabricados de madera re-utilizable y estructuras flexibles.