El atentado perpretado este lunes en Manchester tras el concierto de Ariana Grande, el cual se ha cobrado hasta 22 víctimas mortales, ha tenido su emotiva respuesta por parte de sus vecinos mancunianos quienes han dedicado un conmovedor minuto de silencio en la Plaza de Santa Ana de la ciudad, en honor a las víctimas y sus familiares.

Tras el pertinente ritual de omisión, una mujer se lanzó a cantar el clásico ‘Don’t Look Back In Anger’ (No mires atrás con ira) de Oasis, en un claro llamamiento a la no respuesta con violencia, todo un alegato pacifista. Tímidamente -como muestra el vídeo registrado por Josh Holliday, reportero de The Guardian– algunos de los compungidos asistentes se animaron a acompañar a esta mujer a cantar el que es todo un himno para los británicos, demostrando una vez más, el poderoso influjo emocional de la música.