La mayoría de los cuentos que contamos a nuestros hijos terminan con un “Fin”. Realmente, la mayoría de esas historias no terminan ahí. Todas ellas continúan hasta que todos los personajes que forman parte mueren. Los cuentos de princesas suelen finalizar con el beso, la boda o un baile entre los protagonistas que, durante todo el tiempo que dura la historia, han tenido que recorrer un largo camino hasta “comer perdices”. Ese camino ha sido duro, arduo y lleno de obstáculos. Pero los dos enamorados han conseguido superarlos hasta deshacerse de todos los villanos y dificultades que parecían alejarlos de su meta.

Y una vez que llega el final de la historia, todo parece ir sobre ruedas entre los tortolitos. Por lo que parece, en el mundo de las princesas no suele haber crisis de pareja después de la boda. Cosa inédita. Aunque hay muchos que se preguntan cómo seguiría la historia de muchos de los cuentos populares, solo unos pocos artistas han querido investigar esa incógnita. Entre ellos, Oksana Paschenko.

Esta ilustradora rusa ha buceado en los primeros años de cualquier relación seria y ha realizado unas ilustraciones sobre diversas princesas Disney que todos conocemos. En un primer lugar, Oksana Paschenko nos muestra las diferentes bodas de los personajes del conocido mundo de animación. En un segundo lugar, sin precisar tiempo ni espacio, traslada a estos personajes a diferentes lugares del mundo y muestra ya el embarazo de las diferentes princesas. En último lugar, Oksana Paschenko nos muestra a la prole de estos personajes. La actitud de las princesas cambia a una expresión mucho más maternal e íntima con sus vástagos, con respecto a las que ya conocemos.

Seguramente, muchos empezaremos a preguntarnos si Oksana Paschenko continuará con esta veda ya abierta de llevar más allá de lo conocido la vida de las princesas Disney. Porque no hay nada que más empatice con el público que la realidad misma. Y qué puede ser más real que ver el paso del tiempo de los personajes que una vez conocimos en nuestra infancia.