Cuando ya pensabas que el perreo era el máximo exponente del frotarse como estilo de baile, llega el daggering. ¿El dag.. qué? Lo sé, hasta hace bien poco yo tampoco había oído hablar de él. Pero tranquilo, ahora mismo te introducimos en este sorprendente universo. No corramos y empecemos por el principio.

Allá por los años 70 apareció en Jamaica un nuevo estilo de música, derivado del reggae, el dancehall. Se caracteriza principalmente por que sus ritmos son mucho más rápidos y las letras están cargaditas de un fuerte contenido sexual, un lenguaje muy explícito y mucha denuncia social. El daggering es básicamente la manera de bailar el dancehall. ¿En qué consiste?

Las autoridades sanitarias jamaicanas advierten que el exceso de este baile puede ocasionar daños irreparables en el pene. Y no nos extraña.

Sí, el daggering es simular que se está echando un polvo mientras se baila. Tan simple como escandaloso. Tanto que el gobierno de allí ha prohibido la retransmisión de imágenes o música relacionados con el daggering en los medios de la comunicación. Y como era de esperar, cuanto más prohibes una cosa, más popular se vuelve. Hasta el plusmarquista Usain Bolt practica este baile.

Es justo decir que el dancehall es mucho más que que dos personas restregándose como animales en celo. Es parte de toda una filosofía de vida que gira en torno a la música y los guettos. El documental Hit me with music, del que hemos extraído los primeros vídeos, ha intentado captar esta visión general.

Producido y dirigido por españoles, se adentra en los barrios de la gente pobre, entrevista a los artistas mas representativos de esta cultura y trata de mostrar lo que hay más allá del escándalo. Es un documental hermoso, con una fotografía excelente, que nos enseña a un montón de gente que es bastante feliz a pesar de tener muy poco. Aquí tenéis el trailer completo.