En esta semana dedicada a la temática del Orgullo Gay hay que hacer una mención obligada al artista y dibujante Ben Kimura, que falleció en 2003. Kimura fue uno de los máximos exponentes del arte japonés de temática gay y uno de los más aclamados pintores del llamado homoerotismo mundial. Su trabajo ha intentado dar voz al amor homosexual en su estado más romántico y sensual, sin caer en la pornografía.

Nacido en Japón en 1947, Kimura fue el dibujante erótico gay por excelencia desde 1970 hasta 2003. Fue portada de todas las revistas gay japonesas, entre ellas Barazoku y Sabú. Asimismo, fue el fundador del Studio Kaiz y uno de los miembros del grupo japonés del cómic gay.

Sus obras combinan la estética oriental con la sensualidad masculina. Ha sabido imprimir expresiones realistas en sus figuras pero, a su vez, cubrirlos con un aura dulce y sensible. Sus chicos son el resultado de una mezcla de adolescentes-hombres captados en actitudes taciturnas, melancólicas y, sobre todo, sensuales. La mayoría aparecen semidesnudos, con cuerpos agraciados, musculados, bronceados y hermosos.

La tiza, el pincel o el crayón aparecen como los materiales predominantes aunque el acabado digital es el que suaviza y le da un toque más cálido. Las emociones humanas están expresadas a través del silencio que emanan estas obras, muy característico del espíritu japonés donde la contemplación y la quietud expresan actitudes de intimidad.

El resultado final son unas vigorosas figuras que resultan frágiles e inocentes, sensuales y cándidas, donde el jugueteo amoroso expresa el descubrimiento de la sexualidad y del otro, pero donde el componente pornográfico ha desaparecido por completo.