La firma Desigual ha desembarcado en la pasarela de la capital haciendo un homenaje al ADN de la casa y con una anfitriona de excepción: Alessandra Ambrosio. La top brasileña fue la encargada de abrir y cerrar el desfile de la firma catalana, que celebraba sus 30 años en la sexagésima edición de Mercedes Benz Fashion Week Madrid, encajando a la perfección el lema de la marca «la vida es chula».

Tras los desfiles de Barcelona y Nueva York, Desigual llegaba a Madrid presentando su colección femenina. Ayer pudimos ver mucho color y mucho estampado, que homenajeaba su historia, rescatando y reinventando sus icónicas prendas llenas de flores, corazones, figuras geométricas y formas psicodélicas. Un desfile muy «happy» que estrenaba embajadora y presentaba una simpática Cristina Castaño como azafata de ese viaje exótico que Desigual hacía ayer por el tiempo.