La conexión que existe entre los seres vivos es una realidad que, en algún momento, cada uno de nosotros ha experimentado. Esa sensación de poder entenderse o comunicarse con otro ser cercano, sin necesidad de palabras, hace sentir que existe algo más que la simple modulación de la voz para poder comprender al otro. Está demostrado que el contacto físico es mucho más efectivo, a la hora de expresar nuestro yo interno, que la razón o las palabras. Una caricia, un abrazo, una mirada cómplice son mucho más que simples gestos. Ellos se encargan de proyectar al exterior todo lo que en nuestro corazón habita y lo que realmente sentimos.

Una de las formas más sencillas de poder comunicar nuestro interior es a través de la danza. La expresión corporal ayuda a transmitir todo un flujo de sensaciones que el organismo siente al escuchar música. Y es ese flujo de sensaciones lo que ha llamado poderosamente la atención de la cineasta Kristen Lauth Shaeffer. Esta profesora de cine y arte digital de la Universidad de Chatham ha elaborado un proyecto cuyo resultado es 349. Este número hace referencia a las personas que participaron en él, seducidas por la curiosidad de entender hasta qué punto todas ellas estaban conectadas entre sí.

Para poner en marcha 349, Shaeffer realizó una grabación de una actuación de baile. Ésta grabación serviría para que 349 artistas realizaran una serie de dibujos sobre la misma. Con ello, Shaeffer quería mostrar cómo las disciplinas artísticas conectan entre sí a las personas. Cada uno de los dibujos resulta ser diferente, tanto en método, estilo, color, forma y materia. Sin embargo, si cada uno de ellos se une a los demás para formar una imagen continua de la danza, que crea una película animada.

349 resulta así una animación llena de luz y color, de un estilo y una personalidad múltiple, donde el todo queda supeditado a la parte y donde cada parte resulta esencial para el conjunto. La conexión que se establece no sólo permanece entre los dibujantes y los bailarines, sino que trasciende al observador que comprende enseguida el mensaje que se le está enviando.

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